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Mostrando entradas de agosto, 2017

El Tao da y el hombre actúa

Dibujar el vacío con vacío no es posible. Pretendemos llenar algo cuya naturaleza fundamental es la vacuidad aunque nosotros no podamos percibir más que lo que sentimos. Así evaluamos las cosas en virtud de sus apariencias, sin pararnos a pensar que en realidad no son nada más que destellos dentro de nuestra mente, quizá reflejos de un sueño ya olvidado. Intentamos convencer con palabras de aquello que nuestra mirada niega absolutamente, no por convicción de lo pensado, sino porque nuestro corazón no acepta intermediarios y fluye a raudales para aquel que sabe escuchar lo inaudible. Qué grato aquello que convoca a los sentidos y que falso resulta equivocarse cuando el paladar saborea el dulce néctar de la adulación. No se esconde el significado verdadero del fulgor de un amanecer compartido, todos vimos el mismo principio y el final nos acogerá sin jerarquías. El lamento es una actitud innegociable ante el espíritu, su vacío no contiene ni la más leve queja que evidencie nuestra

Gallos y perros a lo lejos

Crecemos, sin descanso, en cantidad y en calidad. El alma se perpetúa cuerpo tras cuerpo intentando mejorarse a sí misma cuando el velo de la ignorancia no se hace tan tupido como el enigma que nos separa de comprender racionalmente lo divino. Crecemos y avanzamos en la historia de la vida conscientes de que la magnitud de lo que hagamos se diluirá con el tiempo, en apenas mil años pasajeros no quedará nada de este tránsito apasionado. Instruidos en esta realidad incuestionable, podemos decidir una vida con menos para ser más. Hemos crecido y no sabemos realmente si nos hemos equivocado al hacerlo. No sabemos si el futuro necesita muchas más almas para propagar nuestra existencia o si este crecer desmedido será la tumba que cavemos para, simplemente, dejar de ser. El texto nos habla de reducción, de parar el trasiego de un lugar para otro y sentir el espacio y el tiempo presente que nos contiene en cada instante. Saborear nuestra comida, disfrutar lo que tenemos en una morada tr